El tejedor o tejedora, urde y pone en el telar la urdimbre, y mueve la imprimidera con los pies, y juega en la lanzadera, y pone la tela en los lizos. La buena tejedora suele apretar y golpear lo que teje, y aderezar lo mal tejido con espina, o con alfiler, o tupir muy bien, o hacer ralo lo que va tupido; sabe también poner en telar la tela y estirarla con la medida que es una caña, que estira la tela para tejerla igual, sabe también hacer la trama de dicha tela. Fray Bernardino de Sahagún, Historia general de las Cosas de la Nueva España