La palabra máscara proviene del vocablo árabe mashara que significa bufón. Por extensión connotativa el término se amplió desde el siglo XV, para adquirir el significado que actualmente la demos de “rostro falso o postizo”. La existencia de la máscara es universal, ya que se ha presentado en todas las culturas de todos los continentes y, podemos afirmar sin equivocarnos, que es tan antigua como la propia humanidad.