Nombre del documento-códice. El documento que lleva por nombre completo Relación de las ceremonias y ritos y población y gobernación de los indios de la provincia de Michoacán, es un códice que da cuenta de las costumbres, de la organización social, y de las batallas que tenían los indígenas de Michoacán antes de la conquista hispana del siglo XVI. Generalmente se le llama Relación de Michoacán, de forma abreviada. Este códice es de suma importancia para reconstruir la historia antigua de Michoacán, su valor es inestimable para historiadores y antropólogos, y lectores en general.
Autor. La Relación de Michoacán fue escrita alrededor de 1539-1541, posiblemente se deba a la pluma del franciscano Jerónimo de Alcalá –fraile nacido en Vizcaya, España (¿1508-1545?)-, quien la escribiera por encargo expreso del primer virrey que conoció la Nueva España, don Antonio de Mendoza (1490-95-1552), para ser enviada a España.
Procedencia. La información contenida en el documento, proviene de Tzintzuntzan, una de las tres antiguas cabeceras del reino purépecha. Fue proporcionada por sacerdotes indígenas purépecha a Jerónimo de Alcalá. Ellos fueron sus informantes.
Lugar en que se encuentra el códice original. El manuscrito original de la Relación se encuentra en la Real Biblioteca de El Escorial, en el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, en la Comunidad de Madrid, España. No se sabe con certeza cómo llegó el manuscrito a la Biblioteca, pero es muy posible que haya sido el virrey de Mendoza quien lo enviara a Felipe II, para enriquecer el acervo de dicha biblioteca.
Estructura y contenido de la Relación de Michoacán, En un principio la obra constaba de un prólogo y de tres partes: la primera, de la que solamente queda un folio, trataba de los dioses purépecha y de las fiestas que a ellos se les dedicaban; contenía el relato de la construcción del reino desde el arribo de los chichimecas –comandados por Ireticatame- a las ciénagas de Zacapu; de las alianzas políticas con los naranxeños agricultores y los pescadores de Xarácuaro. Desgraciadamente, esta parte desapareció. El folio empieza de la siguiente manera:
El siguiente día, después de la fiesta, llegábanse todas las mujeres del pueblo cerca del fuego que estaba allí y tostaban maíz y hacían cacalote y lo comían allí todas, emborrachándose, y tomaban aquel maíz tostado y echábanlo en miel. Y entraban luego unos que bailaban un baile llama-
do parácata varaqua, y bailaban el dicho baile en el patio que estaba cercado de tablas o en las casas de los papas. Y el sacerdote desta diosa bailaba allí, ceñido una culebra hechiza con una mariposa hecha de papel. Cinco días antes desta fiesta, se llegaban los sacerdotes de los pueblos
susodichos, con sus dioses, y venían a la fiesta y entraban en las casas de
los papas los bailadores llamados çésquárecha y otros dos sacerdotes
llamados hauripicípecha, y ayunaban hasta el día de la fiesta.
En la segunda parte se narra la vida y hazañas del héroe legendario llamado Tariácur, caudillo fundador de los primeros linajes, y da cuenta de la estructura política y de la organización religiosa de los indios. A la letra dice:
SIGUESE LA HISTORIA COMO FUERON SEÑORES EL CACONCI Y SUS ANTEPASADOS EN ESTA PROVINCIA DE MECHUACAN DE LA JUSTICIA GENERAL QUE SE HACIA.
Había una fiesta llamada Equata cónsquaro que quiere decir de las flechas. Luego, el siguiente día después de la fiesta, hacíase justicia de los malhechores que habían sido rebeldes o desobedientes, y echábanlos a todos presos en una cárcel grande y había un carcelero diputado para guardallos. Y eran éstos los que cuatro veces habían dejado de traer leña para los fogones. Cuando el caçonci enviaba mandamiento general para toda la Provincia que trujesen leña, quien la dejaba de traer le echaba preso.