Con el nombre de maíz conocemos a la más importante de las gramíneas del Continente Americano. Su nombre no proviene del español ni del náhuatl, sino del vocablo antillano mahís, perteneciente a la lengua caribe que se hablaba en las Antillas. En la tradición oral de los pueblos nahuas, se afirmaba que habían sido los toltecas quienes introdujeron el uso del maíz entre las tribus cazadoras de cultura poco desarrollada, en el siglo VII d.C., cuando Quetzalcóatl, en su infinita sabiduría, les dio a los mexicas la tecnología necesaria para realizar los cultivos.
Este don de la naturaleza, considerado como un símbolo de la prosperidad otorgada por los dioses, ocupó un lugar preponderante en la alimentación de los mexicas. No sólo regulaba la primaria necesidad de nutrir, sino que también intervenía en la vida social y religiosa de este pueblo. Por lo tanto, existían divinidades relacionadas con el maíz a las que se les rendía tributo y se les organizaban festividades cíclicas en las cuales destacaban las ofrendas de maíz. Según la mitología, Chicomecóatl, Diosa de los Mantenimientos, fue la inventora de los tamales y las tortillas, y a quien correspondía dictar los ritos de comer y controlar la gula de los humanos. Además, estaba Centéotl, Dios del Maíz, hijo de Tlazoltéotl, la Comedora de Inmundicias. A Xilonen le correspondía ser la Diosa de la Mazorca Tierna; e Ilametecuhtli, Princesa Vieja, simbolizaba el maíz seco y estaba estrechamente emparentada con la tierra.
Fue tan importante el maíz en la gastronomía nahua, que recibió varios nombres en atención al estado y las características que tuviera: Se denominaba toctli al maíz germinado y poco crecido. A la flor terminal de la caña se la llamaba miáhuatl. Cuando la mazorca apuntaba ya en la caña, recibía el nombre de xilotl. Élotl era el nombre que recibía la mazorca tierna, pero con granos ya cuajados. El maíz seco en mazorca era centli o cintli. Al corazón de la mazorca correspondía el nombre de élotl. Tlaolli, tlayolli o tlaulli eran los vocablos para designar el maíz desgranado. Finalmente, las hojas que envolvían a la mazorca se llamaban elizhuatl y elototomochtli. Los mexicas tenían varias especies de maíz a las que clasificaban según su color; a saber, el iztactaolli, maíz blanco; el yautlaolli, maíz negro; el cuztictlaulli, maíz amarillo; el toctlaulli, maíz colorado; el xochicentlaulli, maíz color leonado; el xiuchtoctépitl, maíz que se logra en cincuenta días.